A principios de mayo, Carlos Arroyo fue designado por la Federación de Baloncesto de Puerto Rico como gerente general de la Selección Nacional adulta, una posición para la cual cuenta con sólidas credenciales dada su experiencia a nivel de Europa, de la NBA, de la NCAA, y, sobre todo, por su extensa carrera como jugador en el combinado, donde fungió como capitán.

Y hasta el momento, su debut ha sido complicado al ver las bajas de los armadores José Juan Barea y Shabazz Napier, y del pívot Tyler Davis, los retiros de Javier Mojica y Ramón Clemente, y el fallido intento de sacar del retiro al escolta David Huertas con miras al Repechaje Olímpico de Serbia, que se jugará a finales de este mes.

No era lo que Arroyo esperaba. “Yo diría que estoy un poco desilusionado”, explicó Arroyo. “Lo que pasa es que, en cierta parte, uno espera buenas noticias cada vez que se trata de convocar a jugadores clave, y esperas de ellos el mismo deseo que tengo yo y que tienen los técnicos y el presidente de esta federación, y el que tiene el pueblo entero”, comentó.

“Derramamos una confianza y unas expectativas en estos jugadores y esperamos que siempre estén presente, que siempre estén saludables, que haya las posibilidades de convocarlos a todos y que podamos tener el mejor equipo. Y cuando eso no sucede, hay cierta desilusión, pero creo que es parte de esto, y hay que seguir trabajando”, agregó el exarmador.

Arroyo dijo que sabe que la adversidad estará presente con frecuencia en su trabajo, pero que cuando se presente hay que seguir trabajando, y reconoció que el torneo para el cual Puerto Rico se prepara es uno muy difícil “en el que deberíamos estar con los nombres que no están aquí”.

Pero también admitió que no todo el mundo tiene el mismo deseo y compromiso con el pueblo, con la institución del Equipo Nacional y con el baloncesto que él tuvo durante su larga carrera luciendo los colores nacionales año tras año.

“Muchos entendemos la importancia de este clasificatorio, pero está en ti si quieres hacerlo o no. Aquí esto es para el que se convoque, quiera representar al país, y quiera la oportunidad de clasificarse a una olimpiada. Yo la quería,

En su primer torneo como gerente general, Carlos Arroyo tenía la ilusión de presentar un elenco competitivo en el clasificatorio olímpico que se efectuará en Serbia desde el 29 de este mes. pero todo el mundo es diferente. Aquí no se obliga a nadie a jugar. Esto es estrictamente por amor patrio. Por otro lado, también hay algunos como Jose (Juan Barea), que llevan como 14 o 15 años en este equipo sin tener un verano libre. También estuvo meses sin ver a su familia. Cuando yo jugaba en Turquía e Israel estuve mucho tiempo sin mi familia y sé lo que es eso. Es muy difícil”, agregó.

Dijo que la etapa de transición en un equipo con jugadores que han estado antes en la selección y jugadores que vienen subiendo es un proceso que “iba a pasar sí o sí”, e invitó a darle la bienvenida a la nueva realidad y a dar lo mejor. Recordó que potencias como Argentina y Brasil pasaron por situaciones similares.

Se le preguntó sobre qué espera de un clasificatorio que tiene un marco casi idéntico al que asistió en 2016 en la misma ciudad, Belgrado, Serbia, y que marcó su última participación con la escuadra nacional como jugador.

“Cuando ves la edad de este grupo puedes esperar que ganen experiencia. Muchos de ellos no han ido a una competencia de este nivel como (George) Conditt. Nos enfrentamos con equipos bien probados como Senegal, que entiendo que va con cinco o seis jugadores de NBA. Y de Italia sabemos lo que puede dar y que siempre ha sido una potencia”, dijo.

“Pero es un torneo que nos va a ayudar mucho a entender dónde estamos como institución y como equipo”, continuó. “Nos ayudará a desarrollar a los chamacos que vienen subiendo. Hay muchas expectativas con el U-19 que tiene el Mundial en Letonia ahora en julio. Y además, un torneo no define lo que somos. Hay una historia de lo que hemos podido lograr en el baloncesto y el respeto que hemos logrado darle al nombre a nivel mundial”.

La Preselección está entrenando con 14 jugadores. Anoche, el cuerpo técnico iba a hacer un primer corte de dos canasteros para entonces viajar el lunes a Grecia con un grupo de 12. Devon Collier y Gian Clavell se unirán al combinado en Grecia para participar en tres juegos de fogueos.

“Lo que pasa es que, en cierta parte, uno espera buenas noticias cada vez que se trata de convocar a jugadores clave, y esperas de ellos el mismo deseo que tengo yo y que tienen los técnicos y el presidente de esta federación, y el que tiene el pueblo entero”

CARLOS ARROYO GERENTE GENERAL