SANTO DOMINGO.- En el papel, Puerto Rico estaba supuesto a abrir esta Serie del Caribe con una victoria ante Panamá.

Pero no fue así, y el revés le pondrá una presión adicional a los Criollos de Caguas cuando regresan al terreno esta noche para enfrentar al favorito, República Dominicana, en su segundo compromiso.

Los Astronautas de los Santos dieron ayer la gran sorpresa al dejar sobre el terreno por 3-2 a los boricuas en la parte baja de la novena entrada en la jornada inaugural del torneo en el Estadio Quisqueya Juan Marichal.

Puerto Rico tendrá que finalizar entre los mejores cuatro equipos a la conclusión de la primera ronda –en que cada país jugará cinco partidos– para adelantar a las semifinales. A los Criollos les restan partidos ante Dominicana, México, Venezuela y Colombia.

Una victoria ante Panamá era ideal para colocarse en una mejor posición de cara a los restantes compromisos.

“Puede ser que nos complique un poco las cosas, pero queda mucha serie. En la pasada serie perdimos el primer juego (contra Dominicana) y luego nos recuperamos para llegar a la final (y lograr el subcampeonato). Sabemos que somos mejores. No podemos bajar la cabeza”, declaró el dirigente boricua, Ramón Vázquez, a El Nuevo Día a la conclusión del encuentro.

“Pensé que íbamos a ser mejores en la ofensiva. No hay pánico. Nos quedan más partidos y es cuestión de hacer los ajustes para el próximo juego. Estábamos supuestos a ganar, pero como dije desde el principio, aquí hay que ejecutar y ellos fueron más oportunos en la ofensiva”, abundó Vázquez.

Puerto Rico iba encaminado al triunfo hasta que el relevista Fernando Cruz le permitió un jonrón solitario a Olmo Rosario con dos outs en la octava entrada para igualar la pizarra 1-1.

Cruz permitió que otros dos bateadores llegaran a base y fue relevado por Ricardo Gómez que le concedió un sencillo a Christian Bethancourt para que los Astronautas se fueran al frente 2-1. Panamá cogía vida luego de pegar apenas dos indiscutibles en las primeras siete entradas.

Sin embargo, los Criollos se negaron a morir y respondieron en la parte alta de la novena entrada para igualar el marcador 2-2, gracias a un error del campocorto Eduardo Thomas en un batazo de Roberto “Bebo” Pérez con corredores en las esquinas con un out. Fue un momento de alegría para un puñado de fanáticos boricuas en las gradas. Pero no aprovecharon el momento para producir más carreras.

Fue así que Panamá consumió su oportunidad ofensiva ante el relevista Alexis Díaz, y Edgar Muñoz se vistió de héroe al atizar sencillo al derecho con corredores en la segunda y tercera bases. Los Astronautas celebraron en grande su victoria.

“Fue una emoción grande”, describió el piloto de los panameños, Raúl Domínguez, el triunfo. “Tenemos que seguir con los pies en la tierra”.

De esta manera, la novena boricua desperdició una sólida labor monticular del abridor venezolano Nivaldo Rodríguez, quien no permitió carreras en cinco entradas, y de otros dos relevistas que silenciaron la ofensiva de los Astronautas en los primeros siete innings.

AUSENTE LA OFENSIVA CRIOLLA

Los Criollos habían marcado la primera carrera del juego en el cuarto episodio ante el abridor Harold Araúz con sencillo de Pérez. Araúz tiró seis entradas y solo permitió dos hits.

Lo cierto fue que la ofensiva de los boricuas nunca estuvo presente en el partido. Solo pegaron cuatro indiscutibles –uno de ellos extrabases– siendo pocas las veces que amenazaron ante el trabajo de tres lanzadores de los Astronautas. Y en las ocasiones que tuvieron sus oportunidades de fabricar carreras no las aprovecharon al batear de 7-1 con corredores en posición de anotar.

“Tenemos que ser mejores ofensivamente. Hoy no lo fuimos. Llegamos con tres hits a la octava entrada”, dijo Vázquez.

Cruz permitió dos anotaciones en dos tercios de entrada, luego de perder dos juegos en la final con los Indios de Mayagüez. Vázquez le dio un voto de confianza. “Es uno de los mejores lanzadores de nuestro torneo y seguimos confiando en su talento”, dijo Vázquez.