El Nuevo Dia

“Malas mañas”

La dramaturga Alejandra Ramos Riera regresa a la isla a presentar su obra premiada en Nueva York

FRANCISCO JAVIER DÍAZ [email protected]

Dicen que no hay mal que el tiempo no alivie su tormento. Por los pasados cuatro años, la dramaturga puertorriqueña Ale

jandra Ramos Riera había visto como el estreno de su obra tragicómica “Malas

mañas” se había pospuesto, primero por el paso de los huracanes Irma y María, luego por los terremotos y, por último, por la pandemia. Sin embargo, el tiempo llegó para que el público puertorriqueño pueda disfrutar de esta pieza teatral, la cual subirá a escena por primera vez a partir del 26 de mayo, en el Teatro Victoria Espinosa, en Santurce.

Cuando los actores René Monclova, Cristina Soler, Heriberto Feliciano, Isel

Rodríguez y Yaiza Figueroa, aparezcan frente al público Ramos Riera permanecerá en su asiento con una mezcla de emociones que la pondrán a prueba. “Para mí esto es como despedir el año. Estoy feliz, emocionada, llena de curiosidad, muy entusiasmada, porque la verdad es que esto es como un bebé, cuyo parto ha sido complicado, pero ya por fin va a nacer”, explicó entre risas la dramaturga a través del teléfono desde su apartamento en Nueva York, donde reside desde el 2018. “Con todo y las vicisitudes por las que ha pasado la obra, en 2020 ganó un premio en el Miranda Family Voces Latinex National Playwriting Competition, en Nueva York, (certamen de dramaturgia creado por la familia del afamado escritor y actor puertorriqueño Lin-Manuel Miranda) y luego cayó en las manos de Teatro Público. Algo que me pone muy contenta, porque es una compañía que la corren personas que admiro mucho y que cuidan la gesta artística, y de todos los implicados en este trabajo”.

CÓMO NACE LA OBRA

Ramos Riera, quien también es actriz, productora y educadora, comenzó a trabajar en “Malas mañas” en 2017, mientras todavía vivía en Puerto Rico. “En realidad, la obra responde a una preocupación personal relacionada a la corrupción y a la deshumanización que persiste en el llamado supuesto ‘sistema de justicia y de corrección’, entre comillas. Porque, entiendo que estas instituciones, lejos de rehabilitar, muchas veces degradan, humillan a los confinados, quienes lamentablemente a veces son inocentes”, explicó la autora que tiene un bachillerato en Estudios Interdisciplinarios, con concentración en Danza y Teatro, en la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Río Piedras. “También se toca el tema de los encierros y su repercusión psicológica, ya que pienso que no hay que estar encerrado físicamente para sentirlo. La mente es muy poderosa y las circunstancias sociales, políticas y familiares, pueden llevar a que alguna persona se sienta en una prisión dentro de su propia mente y de su propio cuerpo”.

En “Malas mañas”, dirigida por Jorge Rodulfo, el público descubrirá la historia de Omar (Feliciano), quien sale de la cárcel tras cumplir una condena de 15 años por un crimen que cometió en defensa propia. Este convive con su pareja y extrabajadora social (Rodríguez), y decide reconectar con su padre (Monclova), con quien perdió contacto muchos años atrás. El padre, junto a su nueva esposa (Soler) y su hijastra (Figueroa) adicta a las pastillas, acepta la invitación a su apartamento. El encuentro, inicialmente cordial, pondrá a prueba los límites de cada personaje.

La temática seria y profunda fue traída por la dramaturga a través de la tragicomedia, un elemento que utiliza con frecuencia en sus piezas, sean miniobras como obras regulares. Sin embargo, esto surgió como una manera natural en sus escritos. “A mí me gusta mucho el humor negro, algo que tiene que ver con mi personalidad, pero la tragicomedia en mis trabajos ha salido un poco por accidente y se remonta a mi primera obra larga que yo estrené en la Universidad de Puerto Rico, llamada ‘Fuera de juego’”, explicó Ramos Riera, quien tiene una maestría en Artes Escénicas en la Universidad de Murcia en España con concentración en dramaturgia y dirección. “Fue la primera vez que me entero que eso está en mi trabajo, porque estaba convencida que había escrito un drama y de pronto el público no paró de reírse de principio a fin. Y ahí me di cuenta que el drama se tornó en comedia y desde entonces está presente en mis obras”.

A pesar de que ha escrito sobre veinte obras cortas y unas seis de largo formato en inglés y español, todavía siente nervios al ver por primera vez una obra suya en escena, sobre todo por no saber cómo va a reaccionar el público. “Momentos antes estoy muerta de los nervios, pero de nervios buenos, porque me entusiasma ver la reacción del público, porque es algo que no conozco”, mencionó la también educadora quien trabaja en BronxNet TV, localizado en Lehman College en el Bronx, y también con la organización Share for Life.

“El proceso de escritura es muy íntimo y muchas veces muy solitario. Entonces de repente tener a seres humanos que responden a las palabras que, a su vez, las dicen esos actores que en su momento son simplemente personajes en una página, pues para mí es como una montaña rusa de emociones y es pura magia y es parte de lo que me aporta a la pasión que siento por esto”. La autora quiera que llegue el día del estreno para vivirlo. “Ya tengo el pasaje comprado hace tiempo, porque no me pierdo este estreno por nada”, exclamó.

CORRE ARTE POR SUS VENAS

Desde muy temprano en la vida, esta puertorriqueña tuvo en su hogar la inspiración y el empuje para generar una creatividad incesable que todavía al día de hoy se mantiene en su vida. Y esto se debe a que tanto por parte de su padre, el filósofo Francisco José Ramos, y su madre, la cantante y pintora Roxana Riera Gata. Si a esto se le añade que es sobrina del primer actor Jorge Luis Ramos y que

“La obra responde a una preocupación personal relacionada a la corrupción y a la deshumanización que persiste en el llamado supuesto ‘sistema de justicia y de corrección’, entre comillas”

ALEJANDRA RAMOS RIERA

DRAMATURGA

sus hermanos mayores, por parte de madre son el camarógrafo Carlos Javier Pérez y la cineasta Mariem Pérez Riera, se podría decir que el arte corre por las venas de esta dramaturga.

“Crecí con una niñez normal, respetando todos los procesos de la infancia y la niñez, pero a la vez no minimizaba la capacidad intelectual, aunque fuese una niña”, describió la artista que cofundó la compañía Teatro la Azotea, Inc., pioneros en traer el concepto de microteatro a Puerto Rico. “Me daban a leer Franz Kafka, a Gustavo Adolfo Bécquer. El primer libro que leí fue “Esperando a Godot”, de Samuel Beckett. Entonces, estando también envuelta en las clases de filosofía y en la Escuela de Artes Plásticas desde chiquitita, todo eso me llevó a que desarrollase una creatividad muy intensa y una imaginación muy exuberante desde muy pequeña”.

Tanto así, que Ramos Riera escribió y representó su primera obra de teatro cuando tenía 12 años. “El público fue mi bella abuela querida en Caguas. El telón eran sábanas; ella, alcahueta al fin, me dejó j p poner todos los “props” del mundo, undo, incluyendo velas, que era un poco co peligroso, pero no pasó nada”, rememoró ó entre risas. “No sólo la escribí, sino que la a representé con mi mejor amiga y hermana na de la vida, la también actriz puertorriqueña ña nacida en el Bronx, Rosal Colón (actriz de “Orange is the New Black” de Netflix). Interpretamos nterpretamos esa obra en casa de mi abuela”. a”.

PRÓXIMOS PROYECTOS

Además de viajar a la isla para ver el estreno de “Malas mañas”, Ramos mos Riera se mantiene ocupada en estos días as escribiendo el guion de un largometraje, e, junto a su hermana Mariem, quien dirigió gió y editó el documental “Rita Moreno: Just st a Girl Who Decided to Go For It”. Será una comedia romántica que tiene como base ase a Puerto Rico. Además de trabaja para a Teatro Pregones/PRTT, en Nueva York, con una obra que le comisionaron.

Desde que se mudó a Nueva eva York, ha logrado abrirse camino para a continuar creciendo y desarrollándose, tanto como actriz y como escritora, en este e competido mercado. “En Nueva York hay y varias instituciones y afiliaciones que me han abierto las puertas y me he sentido apoyada y he tirado pa’ lante”, añadió esta creativa artista de 35 años. “No me puedo o quejar, pero eso sí, hay que ser proactivo y yo soy persistente. Estoy consciente de que ser artista es una decisión no solo de profesión, pero también un estilo de vida a y que tiene las complejidades que tendría ría aquí en Nueva York, como en cualquier ier parte del mundo. Pero no me arrepiento to de las decisiones que he tomado en mi vida”.

Los interesados en adquirir boletos para alguna de las funciones de “Malas alas mañas”, puede acceder a: www.prticket.com. et.com.

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2022-05-17T07:00:00.0000000Z

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