La remoción de Héctor Joaquín Sánchez, como subsecretario asociado de Educación, ocurrió luego de que el secretario de la agencia, Eliezer Ramos Parés, recibió quejas de integrantes de un comité a cargo de seleccionar a los maestros destacados del año, incómodos con la intervención del funcionario al impartir instrucciones para que los premios se otorgaran a afiliados del Partido Nuevo Progresista (PNP).

El Nuevo Día corroboró la información por tres fuentes ligadas a la agencia, quienes dijeron que el también ex comisionado electoral del gobernante PNP fue apartado del cargo como segundo al mando en Educación, luego de que intervino en decisiones del comité evaluador que tenía funciones de jurado para la actividad “Brilla la Comunidad Escolar”, a celebrarse hoy.

Las expresiones del exsubsecretario se hicieron solo ante algunos de los integrantes del comité, que eran empleados de Educación, y a quienes convocó a una reunión aparte, coincidieron dos fuentes.

Sin embargo, los esfuerzos de Sánchez fueron frenados, pues los empleados elevaron el aviso de la irregularidad a sus superiores, y el secretario Ramos Parés tomó acción, relataron las dos fuentes quienes ofrecieron los detalles bajo condición de anonimato para no ser perjudicadas. Los abogados de la agencia procedieron a tomar declaraciones juradas a los miembros de comité que habían sido convocados por Sánchez, según una de las fuentes con conocimiento de los hechos.

Sánchez, pese a varias llamadas y mensajes de texto a su celular, no contestó por segundo día consecutivo.

Ayer, Ramos Parés no quiso confirmar la existencia de una investigación administrativa, proceso que dijo les compete a la División de Asuntos Legales y la División de Querellas.

“Quiero esperar que las investigaciones culminen su curso, si es que existen investigaciones”, indicó Ramos Parés. “Cualquier investigación, el país la va a conocer. De cualquiera, contra cualquiera. En este momento, no estoy confirmando ni negando que existe una investigación”, añadió. Sus expresiones se dieron, en un aparte con El Nuevo Día durante la ceremonia de premiación de más de mil estudiantes de excelencia académica en las escuelas públicas del país.

Ramos Parés confirmó que Sánchez se encuentra disfrutando de su licencia de vacaciones durante dos semanas, mientras se determina “cuál es el futuro” que tendrá en el gobierno. “Este servidor tomó la decisión y él (Sánchez) entendió que, en efecto, la oficina necesita cambios… Él tiene un puesto de carrera, pero obviamente creo que tiene muchísimas habilidades, muchísimas cosas que aportar al país y puede hacerlo desde otro lugar”, se limitó a contestar.

Una de las fuentes consultadas, dijo que Sánchez se mantiene auscultando a qué agencia de gobierno se puede mover. Una opción sería la Comisión Estatal de Elecciones (CEE), en la que fue comisionado electoral del PNP hasta enero de este año. Sin embargo, dijo la fuente, el salario para Sánchez sería menor al que devenga en Educación. En esta agencia, Sánchez cobra $10,000 mensuales, y de irse a la CEE ganaría $2,000 mensuales menos.

El gobernador Pedro Pierluisi dejó las decisiones de personal en manos de Ramos Parés, pero contestó a la prensa que Sánchez es una persona de su confianza. “Él siempre ha sido de mi confianza. Recuerdo que él dirigió nuestro esfuerzo electoral... así que siempre ha gozado de mi confianza tanto como comisionado electoral de nuestro partido como en el

“Cualquier investigación, el país la va a conocer. De cualquiera, contra cualquiera”

ELIEZER RAMOS PARÉS

SECRETARIO DE EDUCACIÓN

Departamento de Educación. Pero como ya dije, el puesto que tiene como subsecretario es de la confianza del secretario (Ramos Parés). Es el secretario quien decide si permanece en ese puesto o no”, recalcó a periodistas.

A preguntas de El Nuevo Día, Ramos Parés condenó cualquier interés en premiar a personal de la agencia por criterios ajenos a su desempeño y dedicación. “Queremos premiar lo bueno y lo bueno no tiene color. Nuestros estudiantes no lo tienen. Te puedo asegurar que el comité estuvo compuesto por excelentes profesionales que hicieron su trabajo en ese proceso de evaluación. No hubo colores envueltos en esa evaluación”, puntualizó.

De hecho, el proceso disponía tanto de una plantilla para la nominación de candidatos como una rúbrica de evaluación que consideraba 13 criterios, entre ellos, el impacto comunitario, la inteligencia emocional, enseñanza creativa, las estrategias para el rezago académico y el trato a la población de Educación Especial.

Los nominados eran evaluados inicialmente por un comité interno en las Oficinas Regionales Educativas y luego por un jurado externo, que finalmente entrevistaba a los finalistas para hacer su determinación.

Ramos Parés comentó que cualquier “información negativa, contraria a la ley, irregular o de apariencia de ilegalidad”, la referirá para investigación. “Alegaciones, como esas, que pueden haber, deben ser referidas a la División Legal, a la División de Querellas, para que ese proceso se complete”, indicó.

FONDOS FEDERALES INVOLUCRADOS

La selección de un maestro o maestra del año es un reconocimiento que se ha realizado de forma esporádica en las pasadas décadas, principalmente en alianza con el sector privado, pero este año Educación asignó dinero para el premio en metálico del Fondo de Ayuda de Emergencia para Escuelas Primarias y Secundarias (ESSER, en inglés) de la Ley federal para Ayuda, Alivio y Seguridad Económica por el Coronavirus (CARES, en inglés).

El maestro y director reconocido a nivel nacional en Puerto Rico recibirán $5,000 cada uno, mientras que los seleccionados a nivel regional recibirán $3,000 cada uno.

“Después de la pandemia, la gesta heroica que han tenido muchísimos maestros, para mí era importante que nosotros a nivel central reconociéramos esa gesta. No se trata únicamente de premiar a un maestro, se trata de que el resto del magisterio sepa que estamos con ellos, que los estamos apoyando, viendo y que lo bueno va a ser reconocido”, expresó Ramos Parés.

Desde 2017, se empezó a hacer convocatorias de forma anual, hasta que se vio interrumpido por la pandemia de COVID-19. El cuatrienio pasado, el reconocimiento fue auspiciado en varias ocasiones por la Puerto Rico Education Foundation (PREF).

La directora ejecutiva de la PREF, Enid

Marie Reyes, indicó ayer que el rol de la entidad en la premiación de este año, bautizada este año como “Brilla la Comunidad Escolar”, es “muy limitado” y se basó en la donación de “recursos para la coordinación del evento y la transmisión” a través de WIPR, así como trofeos para los premiados.

“No tenemos ningún rol ni participación en el proceso de selección y de manejo de las nominaciones o los procesos de evaluación de los jueces que toman las determinaciones de quiénes serán los premiados. El Departamento convoca, evalúa las nominaciones, crea las rúbricas, diseña el proceso de validación de los datos de nominados y selecciona a sus jueces. Nuestra Fundación no participa de esos procesos”, expresó Reyes en declaraciones escritas.

Los líderes de la Asociación y la Federación de Maestros, Víctor Bonilla y Mercedes Martínez, respectivamente, deploraron cualquier intento por politizar aún más la agencia. “Entiendo que, si el secretario tomó la decisión (de removerlo), estoy seguro que la tomó con toda la responsabilidad que conlleva”, apuntó Bonilla. Agregó que él había sido convocado al comité de selección de los maestros premiados, pero “luego me cancelaron”.

Martínez sostuvo que era “previsible” la salida de Sánchez. “Era previsible como es previsible que todos los nombramientos políticos en el Departamento de Educación -que son cientos- tendrían que aplicar lo mismo a todos para que realmente no haya politiquería dentro de la agencia”, sentenció.