El Negociado de Energía de Puerto Rico cuestionó ayer la claridad de las estadísticas sobre la interconexión de clientes al programa de medición neta o energía renovable distribuida provistas por LUMA Energy, y advirtió que el consorcio pudiera estar mostrando un escenario más favorable de lo que realmente es.

En respuesta, LUMA negó cualquier anomalía en torno a las cifras, y destacó que los datos entregados atienden, precisamente, exigencias del Negociado que antes eran satisfechas por la Autoridad de Energía Eléctrica. El consorcio recomendó, incluso, que se ajusten o enmienden dichas exigencias prospectivamente para evitar discrepancias, a lo que el ente regulador replicó que cualquier petición de esa índole debe ser sometida y justificada por escrito para que sea considerada.

En una vista virtual de cumplimiento ante el Negociado, representantes de LUMA detallaron que el 92% de las conexiones al programa de medición neta –que permite que clientes instalen, consuman y exporten su propia energía renovable– se hace en menos de 30 días, con un promedio de 14.

Pero, a preguntas del comisionado asociado Ángel Rivera de la Cruz, la directora de Modernización de la Red, María Hilda Rivera , y el gerente de Transformación de la Red, Alfonso Baretty, admitieron que el 92% no corresponde “al universo de casos”, sino a los clientes que fueron conectados entre febrero y abril de 2022.

En dicho trimestre, LUMA recibió 5,283 solicitudes de conexión, de las cuales 5,238 fueron de “flujo expedito”, es decir, sistemas de menos de 25 kilovatios. Las nuevas conexiones sumaron 6,149, y Rivera y Baretty explicaron que fueron más que las solicitudes, ya que algunos casos venían arrastrándose de períodos anteriores.

Por otro lado, reconocieron que, al cabo del trimestre, quedaron 2,053 solicitudes de medición neta pendientes (“backlog”), con 195 de períodos anteriores. De las solicitudes pendientes, el 97.75% o 2,007 son de “flujo expedito” y, de estos, el 34.87% 0 700 tienen más de 30 días en espera.

“Estamos hablando de que se está interconectando, sujeto a verificación, entre un 65% y 70% dentro del término de 30 días, dado que se tiene un ‘backlog’ de más dos mil casos. El 92% es de las conexiones (entre febrero y abril de 2022), pero es un porcentaje distinto del universo de casos. Yo puedo coger un ‘set’ de datos y hacer que digan lo que yo quiero que digan, y presentar los datos de forma más favorable. Ese 92% que se pone bien grande en la presentación es, realmente, de los casos que se pudieron conectar durante el trimestre”, dijo Rivera de la Cruz.

Baretty respondió: “Ciertamente, sí”. “Como LUMA, hemos seguido dando la información en el mismo formato que la daba la Autoridad”, añadió.

Yahaira de la Rosa, abogada de LUMA, intervino para pedirle al Negociado que “se revisen las métricas” requeridas al consorcio y que “estemos todos claros de con qué tenemos que cumplir y de qué manera para evitar que haya incertidumbre o tener que corroborar información”.

La comisionada asociada Lillian Mateo le respondió que someta la petición por escrito y sustente “por qué usted cree que no debemos hacer las preguntas que estamos haciendo y por qué el pueblo no debe tener la información que estamos solicitando”.