El apoderado de los Atléticos de San Germán, José “Cheo” Rivera, se mantendrá a la espera de los próximos pasos que tome el Baloncesto Superior Nacional (BSN) en torno a la investigación que esta liga realiza por los incidentes ocurridos la noche del domingo en un partido ante los Cariduros de Fajardo y que desembocaron en la agresión a un árbitro y la expulsión del dirigente Eddie Casiano.

Rivera señaló que aunque la liga no se había comunicado con ellos directamente al momento de conversar ayer con El Nuevo Día, esperaría por el resultado de la vista que suele hacerse en estos casos.

Asimismo, expuso que en el partido del domingo hubo jugadas que no fueron cantadas por los árbitros, lo que espera que sea analizado durante el proceso, y compartió que el alero Josué Erazo terminó con una cortadura en su boca producto de un golpe en el juego.

“A veces uno se frustra en situaciones pero son cosas del juego. Sí entendemos que en este caso hay que ver más a fondo lo que pasó. Hubo un número de situaciones que no hubo ningún tipo de llamada en cuestión de jugadas que pueden haber llevado a estas situaciones”, declaró Rivera.

“A Josué Erazo le rompieron el labio. No se pita nada y después se le pita una técnica a él (a Erazo) por pedir por esa situación. Las cosas fueron escalando, un fanático entra a la cancha. Obviamente, Eddie está protegiendo a sus jugadores. En

Guaynabo en Santurce, 8 p.m. ●

ningún momento está increpando ni diciéndole nada a los árbitros”, añadió el directivo, que catalogó de “serio” el golpe que recibió su jugador.

Sobre Casiano, fue enfático en que cuenta con su confianza “para el resto de la vida”.

La situación que provoca la investigación del BSN ocurrió en el tercer parcial cuando los árbitros pitaron técnicas consecutivas a Erazo y José “Money” Rodríguez -ambos de San Germán- tras una falta en contra de los Atléticos. Casiano, no conforme con la decisión de los oficiales, entró a cancha a discutir y fue expulsado del partido.

Posterior a esto, un fanático accedió al tabloncillo y agredió al árbitro Jorge Vázquez, que terminó el partido con un vendaje en una mano. Estos incidentes mantuvieron paralizado el partido por unos 45 minutos. San Germán ganó por 91-90.

Por otro lado, el apoderado señaló que no van a hacer ninguna reclamación en el caso de la multa y la suspensión por un partido impuesta al alero Rondae Hollis-Jefferson luego de su descalificación por golpear con su codo al rostro del delantero cariduro Eric Griffin.

En este incidente -ocurrido cuando el reloj marcaba los 7:57 del tercer parcialGriffin recibió un codazo en su cara mientras marcaba a Hollis-Jefferson cerca del canasto. Aunque los ánimos se caldearon, la situación no se salió de control.

El partido de suspensión iba a ser cumplido por Hollis-Jefferson anoche, cuando los Atléticos reciban a los Vaqueros de Bayamón.

El Nuevo Día intentó comunicarse con el apoderado de los Cariduros, Wilson López, y el director de torneo del BSN, José Couto, pero al cierre de esta edición las llamadas no fueron contestadas.

El BSN anunció en un escueto comunicado que asignó un oficial examinador -que no reveló el nombre- para estudiar lo sucedido en Fajardo.