Aficionada al senderismo en Estados Unidos, la aguadillana Alexandra García viajó en el periodo navideño a la isla para vacacionar y, a la misma vez, comenzó a planificar un extenso recorrido por la naturaleza en el área este de la isla.

La idea era recorrer un trayecto de 35.57 millas en un solo día desde las Cabezas de San Juan en Fajardo hasta la Vereda el Toro en Canóvanas. En la ruta, ella pasaría por la Playa La Pared en Luquillo, subiría hasta la Vereda Bisley en Río Grande, y atravesaría parte de las veredas y ríos del Bosque Nacional El Yunque hasta llegar a Canóvanas.

Para hacerlo, Alexandra, de 30 años y residente en Tennessee, hizo múltiples gestiones desde obtener un permiso especial de la administración de las Cabezas de San Juan hasta contactar a grupos sin fines de lucro -que cuidan de las veredas en esta área de la isla- con la idea de recopilar la mayor información posible sobre las condiciones de terreno que encontraría durante la ruta, la cual no está trazada ni definida.

“Si algo hice bien fue la preparación; la logística. Sabía de todo. Y esto conllevó comunicación con agencias del gobierno y organizaciones, y ayuda de muchas personas que me brindaron información de las veredas”, contó a El Nuevo Día la ingeniera química de profesión, egresada de la Universidad de Puerto Rico, Recinto de Mayagüez.

Fue así que un día de la semana pasada, Alexandra llegó a Fajardo para comenzar el recorrido a las 5:35 de la mañana y lo completó a las 6:53 de la tarde. Tardó 13 horas con 18 minutos en completar la ruta, más o menos el tiempo estimado por ella.

“Había proyectado en completarlo entre 12 y 14 horas”, dijo.

Alexandra no hizo sola el recorrido, ya que contó con la compañía de su hermano Daniel, y la de cuatro integrantes de la organización sin fines de lucro ‘Love in Motion’ y de un empleado de El Yunque en diferentes tramos de la ruta.

“Hay secciones que necesitas acompañantes, especialmente, en El Yunque, donde hay partes peligrosas. Hay que cruzar los ríos Mameyes y de la Mina, y hay secciones de veredas donde hay deslizamiento de terreno. Pero la experiencia fue brutal. No sabía que había tanta belleza en esa ruta”, compartió Alexandra, quien lleva siete años apasionada de esta actividad al aire libre desde que se mudó a Estados Unidos.

Después de completar esta aventura y recorrer otras rutas en diversos puntos de la isla en los últimos años, Alexandra puede asegurar algo: Puerto Rico cuenta con los recursos naturales para desarrollar más senderos para la práctica de esta actividad alrededor de toda la isla.

Esto podría impulsar más el turismo en momentos que la búsqueda de lugares para llevar a cabo actividades al aire libre ha incrementado desde la pandemia de COVID-19 en todo el mundo, según reportes de prensa.

Y lo dice alguien que ha tenido la oportunidad de recorrer varios parques nacionales en Estados Unidos, incluyendo el más visitado en la nación en 2021, el Great Smoky Mountain, entre Tennessee y Carolina del Norte, con 14.1 millones de personas.

Según un reporte del portal National Park Service, las visitas a este parque en 2020 con 12 millones de personas tuvieron un impacto económico en la comunidad de $1,300 millones.

El senderismo es considerado una actividad deportiva no competitiva que consiste en caminar por el campo siguiendo un itinerario determinado, y en Estados Unidos se estima que cerca de 59 millones de personas lo practicaron, al menos, en una ocasión en 2021.

“Hay estados que se conocen por sus parques nacionales. La cantidad de personas que los visitan es asombrosa y genera una cantidad sumamente importante de dinero”, dijo Alexandra.

“No creo que soy la única en pensar que Puerto Rico tiene una diversidad de recursos naturales que puede competir con países como Costa Rica, República Dominicana y Estados Unidos. Hay un gran potencial porque los recursos naturales ya están ahí”, sostuvo.

Alexandra no solo habla de la hermosa naturaleza en el área este de la isla. Du

“En el área oeste (de la isla) veo oportunidades de desarrollar veredas como en el este... Veo muchos lugares de valor turístico en ese territorio”

ALEXANDRA GARCÍA AFICIONADA AL SENDERISMO

rante los pasados años también ha tenido la oportunidad de visitar los bosques en Maricao, en Guánica y en Guajataca, Quebradillas. Y entiende que hay el potencial de desarrollar más senderos.

“En el área oeste veo oportunidades de desarrollar veredas como en el este. Veo una gran oportunidad entre Quebradillas, Isabela y Aguadilla, saliendo del bosque de Guajataca, pasando por el túnel de Guajataca, y llegando hasta el Parque Colón de Aguadilla. Veo muchos lugares de valor turístico en ese territorio”, compartió.

“Personalmente, me gustaría ayudar a entidades y a los municipios en la planificación de rutas. Mis experiencias en Puerto Rico las estoy compartiendo en un blog (https://www.trailrunningpuertorico.com/blog-3/Veredas-noreste-en-un-dia-plan-final-puerto-rico) para que otras personas puedan conocerlas y vean los recursos de nuestro país. Creo que como país tenemos mucho para ofrecer en esta área”, apuntó Alexandra, cuya próxima aventura podría llevarla desde Ponce hasta el Cerro de Punta de Jayuya, el pico más elevado de la isla con una altura de 1,338 metros sobre el nivel del mar.

PROYECTO: VEREDAS DE NORESTE

Y con el objetivo de diversificar la oferta ecoturística en la parte este de la isla, actualmente, se está desarrollando un proyecto conocido como Veredas del Noreste entre los municipios de Fajardo, Río Grande y Luquillo.

El mismo busca “tener una red de veredas recreativas y educativas, de la montaña a la costa, que sean sostenibles, seguras, de clase mundial y con acceso a experiencias, aventuras, descubrimientos, conocimiento, variedad de alojamientos, conexiones y sentido de realización”, lee la misión en el portal Canocum.

“Las Veredas Noreste tendrán una ruta muy parecida a la que hizo Alexandra. De las Cabezas de San Juan, que vaya por el Corredor Ecológico Noreste, entrando por la Vereda Bisley hasta llegar al Toro”, compartió Alberto Rivera, quien es parte del proyecto como coordinador del grupo de desarrollo de veredas y además es miembro de la organización ‘Love in Motion’.

“En el caso de Alexandra, ella hizo una ruta que no estaba definida, ya que recorrió un tramo por la carretera y nosotros queremos evitar que la gente camine por las calles. Estamos buscando una manera más realista de conectar los corredores y hacer veredas nuevas. Es una ruta de 40 millas y la idea es que las personas la completen acompañadas en tres días. Que puedan acampar y conocer los diferentes ecosistemas y comunidades. Creo que sería la ruta más larga, de manera definida y trazada, en la isla”, apuntó Rivera.

Rivera también cree en el “gran potencial” que tiene la isla para seguir desarrollando senderos y asimismo que tenga un mayor impacto en el turismo interno y del exterior.

“El turismo interno ha crecido mucho en los últimos años. Contamos con excelentes recursos naturales para hacer senderismo. Hay que mejorar las facilidades existentes, tener más mapas y estacionamientos, y hace falta una mejor comunicación entre los municipios. Hay mucho potencial económico”, apuntó Rivera.

INTERÉS DEL TURISTA EN 2022

Y al parecer, el senderismo luce como una actividad buscada por los turistas.

Según datos de Discover Puerto Rico, la organización de mercadeo del destino (DMO, por sus siglas en inglés), El Yunque, las Cabezas de San Juan, el Bosque Toro Negro de Orocovis, el Refugio Nacional de Vida Silvestre de Cabo Rojo y el Jardín Botánico de Caguas figuraron entre los 10 destinos más buscados en el portal por los turistas en 2022, un año récord para la industria turística, con la llegada de sobre 10 millones de pasajeros.

En su portal, Discover Puerto Rico tiene contenido de las rutas populares de senderismo en Puerto Rico, mencionando El Yunque, el Bosque Seco de Guánica, Bosque Estatal Toro Negro, Guajataca y Cambalache, entre otros.

“Alrededor de uno de cada tres visitantes (en 2022) participó en actividades recreativas al aire libre y/o hizo senderismo”, informó Discover Puerto Rico.