La escasez de vivienda asequible en Puerto Rico continúa siendo un problema para miles de personas que intentan, con ilusión, comprar un hogar.

Y aunque típicamente se piensa que las personas que encaran escollos para convertirse en dueños de un hogar son jóvenes, en Puerto Rico, también hay un número no precisado de personas mayores de 50 años que aún no cuentan con un techo propio.

Es el caso de doña Yolanda Amaro, de 66 años, quien acudió junto a su esposo a la Feria Hipotecaria de la Asociación de Banqueros Hipotecarios (MBA, en inglés) el pasado fin de semana.

“Venimos a orientarnos. Nuestro hijo fue el que nos ayudó en el proceso y venimos a eso, a orientarnos y tener conocimiento para prepararnos. Hoy es el día que empezamos nuestro camino hacia eso (la compra de su primer hogar)”, dijo la sexagenaria, quien espera beneficiarse del Programa de Asistencia Directa al Comprador del Departamento de la Vivienda.

El programa permite a una persona que, por ejemplo, tenga un ingreso anual de $50,400 y que interese comprar una vivienda acceder hasta un máximo de $55,000 que puede utilizar como pronto pago para completar la transacción.

Datos compartidos por el secretario de la Vivienda, William Rodríguez, indican que 11.4% de las 7,499 personas que han podido cerrar un financiamiento hipotecario con la subvención de los fondos CDBG-DR son residentes mayores de 54 años. Por la naturaleza del programa, estos beneficiarios no tenían hogar propio al momento de la solicitud.

“No son la mayoría, pero es una cantidad considerable (de adultos mayores que se han beneficiado). Hasta el momento, 853 personas mayores de 54 años ya se beneficiaron como parte del proceso”, detalló Rodríguez a Negocios.

A juicio del economista y presidente de Estudios Técnicos, Inc. (ETI), Graham Castillo, la posibilidad de un aumento de adultos mayores en proceso de adquirir un hogar, pudiera estar cimentada en las ayudas disponibles para los compradores.

“Posiblemente, uno de los factores por los cuales las ventas no se impactaron tan fuerte, tiene que ver con el mercado de compra con fondos CDBG-DR, que está llenando un espacio bastante considerable en la venta de vivienda”, mencionó.

A LA BAJA LA VENTA DE PROPIEDADES

Según la Oficina del Comisionado de Instituciones Financieras (OCIF), la venta total de unidades de vivienda en Puerto Rico se redujo 16.8% en el pasado año. En total, durante el 2022, se vendieron 10,915 viviendas nuevas y existentes, al compararse con el año 2021, cuando se registró la venta de 13,131 unidades.

Las cifras de hace dos años estuvieron impulsadas, mayormente, por la baja histórica en las tasas de interés hipotecario, cuando se establecieron cerca del 2%. Al presente, las tasas de interés en préstamos hipotecarios rondan entre un 5.87% y hasta un 6.99%, según cifras oficiales.

Y hasta agosto pasado, los números provistos por la OCIF, apuntan a que en el 2023, el número de unidades de vivienda vendidas podría caer por segundo año consecutivo. Hasta agosto, se habían vendido 7,042 propiedades, lo que representa una reducción de 574 unidades, al compararse contra el mismo periodo para el año 2022, que apuntó 7,616.

INCUMPLEN CON LOS REQUISITOS

Para el joven matrimonio de Joangelis Gutiérrez y Carlos José Navarro, de 27 y 30 años, respectivamente, el proceso de conseguir una propiedad que se acople a su presupuesto se ha convertido en un reto.

Llevan seis meses buscando el techo de sus sueños y no lo consiguen.

“Soy profesional de la salud y, realmente, el salario que recibo con los precios de las casas, es un reto. En muchas ocasiones, es difícil conseguir la vivienda, porque los salarios no son suficientes para sufragar los altos costos en las viviendas”, expresó Gutiérrez.

En su intento de conseguir un hogar enCayey, que ronde los $130,000 o $150,000, se han topado con propiedades que podrían comprar según su presupuesto, pero requieren arreglos significativos.

“Hay muchas propiedades que están en $150,000, pero necesitan mucho arreglo. Que no se pueden vivir justo después del cierre”, explicó Navarro.

Entre los años 2021 y 2023, el precio promedio de las propiedades vendidas en la isla fue de unos $176,410 y $251,068 en unidades existentes y de nueva construcción, respectivamente, según la OCIF.

Mientras, para 2022, el 66.8% de la demanda de propiedades fue en unidades de $150,000 o menos, según Estudios Técnicos.

En términos simples, las unidades de vivienda que puedan estar disponibles necesitan reparaciones o las unidades que podrían ser elegibles son más caras.

Datos de la OCIF demuestran que en relación con el 2014, el precio promedio de una vivienda en Puerto Rico, nuevas y existentes, -considerando el total de las ventas efectuadas y en las que medió un préstamo hipotecario- había apreciado al menos 13% para el 2022. Y entre los meses de enero a agosto pasados, el precio promedio habría subido otro 6% en relación con diciembre de 2022.

En agosto pasado, según la actividad hipotecaria documentada por la OCIF, el precio de las propiedades vendidas en ese mes se situó en unos $194,685.

MENOS PODER ADQUISITIVO

En contraste, según la Encuesta sobre la Comunidad del Negociado del Censo de Estados Unidos, el 2022 marcó una reducción de 1.3% en la mediana de ingreso de las familias en Puerto Rico, de unos $29,901 a cerca $29,544 anuales.

Aunque en dólares, la diferencia represente solo unos $357 menos al año, el estimado del Censo coincide con un periodo de alta inflación que, en el contexto de la vivienda, incluye el aumento de precios y tasas hipotecarias que se han triplicado en relación con el 2021.

En el 2021, cuando las tasas de interés rondaban 2.5%, un potencial comprador con la mediana de ingreso familiar de $29,544, sin deudas y sin incluir pronto y gastos de cierre, podía cualificar para una hipoteca a 30 años de hasta $166,000 en un préstamo convencional.

Al presente, con tasas hipotecarias en el

“Soy profesional de la salud y, realmente, el salario que recibo con los precios de las casas, es un reto. En muchas ocasiones, es difícil conseguir la vivienda, porque los salarios no son suficientes para sufragar los altos costos en las viviendas” JOANGELIS GUTIÉRREZ JOVEN EN BUSCA DE HOGAR